El estreno simultáneo de Barbie y Oppenheimer ha hecho que las salas de cine de todo el mundo se llenaran, y lo ha logrado sin seguir las tendencias actuales de la industria.
En la era de los universos cinematográficos que interconectan sagas de películas y series, de las secuelas que continúan historias ya conocidas, y de los remakes que nos cuentan lo mismo varios años más tarde, el fenómeno de Barbenheimer es un soplo de aire fresco para la industria del cine. Así, al menos, lo cree el director Francis Ford Coppola.
Durante los últimos meses, Barbie de Greta Gerwig y Oppenheimer de Christopher Nolan han estado llenando titulares y alimentando a internet con el hype por ver estos dos grandes estrenos en un mismo fin de semana, pues se daba la singular circunstancia de que ambas películas aterrizaban en la cartelera veraniega de manera simultánea.
Barbenheimer inicia una edad dorada para el cine
Después de una pandemia que debilitó los estrenos en las salas de cine, y viendo lo reiterativo de los últimos lanzamientos, Barbie y Oppenheimer han logrado que el Barbenheimer se haya convertido en uno de los mejores estrenos cinematográficos de todos los tiempos, con una recaudación conjunta en taquilla de 240,5 millones de dólares.
Lo mágico del Barbenheimer es que ambas películas han logrado hacer historia siendo originales, sin ser secuelas, sin ser segundas partes, tal y como aseguró Francis Ford Coppola en las últimas horas a través de sus historias de Instagram:
“Todavía no he visto [Barbie y Oppenheimer], pero el hecho de que la gente llene los grandes cines para verlas y que no sean ni secuelas ni precuelas, que no lleven ningún número, es decir, que sean verdaderas piezas únicas, es una victoria para el cine“.
Francis Ford Coppola no se quedó ahí, y en otro post añadió que nos encontrábamos ante una nueva era cinematográfica: “Mi corazonada es que estamos al borde de una edad dorada. Cine maravilloso e iluminador visto en grandes salas“. Barbenheimer sigue haciendo historia.
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Francis Ford Coppola dice que el Barbenheimer es “una victoria para el cine” por una característica en concreto